Animales terapéuticos

Cuando realice mi tesis de Tanatología quería hacerla sobre un tema poco explorado o del que se hablaba muy poco, estando sola en aquel entonces de pronto me di cuenta que mi gran compañía era esa pequeña gatita que me había acompañado en los momentos clave de mi vida y pensando en un buen trabajo de tesis hubieron otros ejemplos de gente cercana que me inspiraron a realizar aquella tesis que hablaría de las mascotas y su importancia en las vidas de sus dueños, de la ayuda que estas mascotas pueden brindar a personas próximas a morir y del dolor que provoca la partida de nuestras mascotas para aquellos que tuvimos el privilegio de tener un amigo inseparable y fiel.

Hace dos días supe por mi madre quien cuidaba a mi gatita que la decisión de dejarla ir había sido tomada un día antes y que sus cenizas estaban listas, mi madre estaba devastada y recuerdo aún el día que supo que yo tenía una gatita, prácticamente me dijo "yo no quiero ningún gato en mi casa" y al final de la historia (la cual es muy larga) mamá terminó cuidando de esa gatita pero sobre todo terminó enamorada de ella, al fin en años de soledad encontró en ella a una amiga fiel, que la esperaba todas las noches en casa y que no pedía más que unas caricias y compañía.

Aquella gatita me acompañó en mi soledad, en mis momentos más difíciles, se mudó conmigo a Cancún, regresó al DF, nos mudamos de casas, cuando me casé me acompañó a Nogales, era mi amiga inseparable, la única que no se peleaba nunca conmigo, la que me brindaba consuelo en mis momentos tristes y compartía mi felicidad.

Esa gatita le cambió la vida a mi madre, aunque siempre se quejó amargamente de sus pelos que dejaba por toda la casa y los muebles.

Los animales son terapeutas expertos sin necesidad de recibir una preparación especial, lo llevan en su naturaleza simple y honesta, saben simplemente estar ahí para nosotros, están siempre disponibles, viven para nosotros, quien se ha dado la oportunidad de tener una mascota sabrá de lo que hablo, ellos nos enseñan el don de la paciencia, del amor, de la entrega. Para aquellos quienes no se han dado esa oportunidad, en verdad, vean el ejemplo de mi madre y les aseguro que una mascota es capaz de llegar al corazón más duro e impenetrable.

Para aquellos que no han tenido una relación duradera, yo no les aconsejaría tener una plantita y cuidarla, más bien les aconsejaría tener primero una mascota y ahí aprenderán de lo que trata el amor en verdad, esa entrega mutua, sin condiciones, honesta, sin disfraces o pretensiones.

Los animales nos ayudan a sanar los corazones, la mente, y por ende mejoran nuestra salud, son nuestra conexión a la naturaleza, no se trata sólo de tenerlo cerca, se trata de conectarte con el, de ser parte suya y hacerlo parte tuya, de volverse uno mismo, de saber que sienten y piensan ambos.

En esta despedida sólo me queda darle las gracias a mi gatita Nala por todo el tiempo que me brindó, por el amor que me enseñó, por la paciencia que obtuve gracias a ella y de la cual ahora mi hijo se beneficia, darle gracias por todas las aventuras compartidas, por haberme hecho sentir siempre acompañada y nunca sola, por haber sido una gata tan perro, por su grande e inmenso amor, por siempre Gracias Nala!!!!