Pensamiento personal de la película "El viaje de nona"

Hoy Lunes por la mañana me sorprendí despertando temprano y prendiendo la TV para encontrar gratamente una película mexicana (las cuales no sigo mucho) llamada "El viaje de nona", sinceramente la dejé primero por que extraño a mi hermano terriblemente y el enseñó a mi sobrino a decirle de esta forma a su abuelita, misma que mi hijo llama Cuki. Después vi en la película actores reconocidos y noté que giraba en torno a una abuelita quien ya había perdido a su esposo y se encontraba en el delicado estado de la vejez donde las cosas comienzan a olvidarse, donde la salud juega con el cuerpo y por días parece todo bien y de pronto recaen sin saber en que parará. Y por si fuera poco se trataba de una de esas familias ya casi inexistentes donde aún se reúne la mayoría para comer y compartir, aunque ya cada hijo y nieto están tan metidos en sus propios mundos que es poco el interés que muestran por los demás. 

Este artículo no es para contar la historia ya que considero que vale mucho la pena ver la película y no quiero estropearla mucho, pero hay un mensaje más allá que me parece digno de enmarcar y tratar rescatar para quien se atreva a hacerlo.

El mensaje final y muy personal es meramente tanatológico, se trata de entender la muerte para poder vivir mejor, plenamente. Quizá lo que me deja esta película tenga mucho que ver con el hecho de que estoy en días de ser madre por segunda vez, y la primera vez que pasé por esto definitivamente fue una experiencia tanatológica completa, reviví de algún modo toda mi vida, tuve la oportunidad de comenzar de nuevo y de cero por decirlo de alguna forma, me "dieron" una segunda oportunidad en mi vida en la cual retomé absolutamente todo lo que en verdad tengo y vale para mi hoy por hoy; esta ocasión me preparo con antelación, sé lo que viene y estoy dispuesta a vivirlo plenamente y esto abre absolutamente mis sentidos y por ende mis sentimientos, por lo que no puedo evitar el estar más receptiva y hasta cierto punto melancólica y no tanto por mi sino por los seres amados a los que me gustaría que este mensaje llegara de verdad.

Desearía que todos tuvieran o más bien se dieran la oportunidad de vivir de una forma distinta sus vidas, que pudiesen ser capaces de vivir el día a día, olvidando el pasado que sólo sirve para destruir, que salvaran el pasado que sirve para seguir creciendo, seguir avanzando. Es verdad que todos tuvimos buenos y malos momentos, es cierto que es imposible comparar tu vida con la mía y con la de alguien más, no se valen las comparaciones pero ojalá que fueras capaz de entender que todo, absolutamente todo lo que te tocó vivir puede y debería ser usado solo y únicamente en tu beneficio, pero esto es sólo decisión tuya y de nadie más. A todos en algún punto nos "hubiera gustado que..." nuestra vida fuera distinta, que nuestros padres no nos dijeran cosas feas, o que no nos golpearan, o que nos hubieran dado más de su tiempo, o haber hecho nuestros sueños realidad, o haber tenido unas vacaciones en familia, haber tenido a nuestros padres biológicos con nosotros y no ser adoptados, que no nos compararan con otros, en fin, sea cual sea tu realidad te apuesto que muchas veces has recurrido al "me hubiera gustado que". 

Lo cierto es que tu realidad es lo que has vivido, la quieras recordar o te empeñes en decir que la has olvidado, es tu realidad y de ella nadie escapa, ni siquiera los psicóticos lo hacen totalmente, y que mejor propósito podrías darle a tu vida que validarla y poder decidir conscientemente que estás dispuesta o dispuesto a avanzar, a vivir el día a día sin amarguras, sin reproches, sin esas ataduras que sin darte cuenta tu sólo has decidido ponerte y te las has apretado cada vez que has querido recordar con dolor todo lo que decidiste te hiciera daño, y obviamente después de tantos años han dejado marcas en ti, marcas que tu has decidido no olvidar y verlas a cada momento para recordar tu propio dolor e ignorar que desde un inicio fue solo tu decisión. 

Esto es solo un pensamiento con cara de invitación para que te atrevas a vivir desde hoy de una forma distinta, aprende por la mañana a respirar correctamente, a agradecer que vives, por que vivimos por amor, pero ese amor debería comenzar desde tu interior y no porque otros te quieran o no. Aprende a amarte, a amar la vida por el simple hecho de ser, si logras este primer paso el segundo será más sencillo y es el perdonar de corazón, pero no perdones a otros por lo que te hicieron, perdonate a ti mismo por haber permitido hacerte daño, por el primer momento donde decidiste que eso te dejaría marcado, por decidir estar triste o guardar rencores a otros que lo más seguro es que ni sepan lo que hicieron y que aunque lo supieran nada cambiará lo que ha pasado. Esto es aprender a vivir de una forma distinta, no guardes rencores, deja de ver esas marcas del alma que tu mismo te has causado, aprende a ver las marcas que la vida te dejó por que esas son un recordatorio de tu nueva oportunidad, si tienes cicatrices de operaciones, agradece tenerlas ya que por ellas sigues aquí y tienes esta nueva oportunidad, si eres madre y tienes marcas en tu panza agradecelas ya que pase lo que pase siempre te recordarán aquel momento donde lo viste por primera vez y tu mundo cambió, si tienes cicatrices por caídas agradece haber tenido primos o hermanos que te impulsaran a explorar y a vivir, deja atrás el rencor y da día con día, hora con hora una nueva oportunidad de disfrutar, hazlo por ti y sin darte cuenta le harás un favor a los demás. 

Recuerda que tu mamá no es la misma que mi abuelita, que mi hermano no es lo mismo que tu esposo o tu ex, que el mío no es lo mismo que tu hermano, cada quien vivimos las relaciones de distinta manera y que, aunque alguien hoy me haya hecho daño, está en mi y solo en mi el decidir dejarlo donde pertenece, en el pasado, y darme una nueva oportunidad hoy de vivir algo completamente distinto porque simplemente así he decidido vivir mi vida, libre, sin rencores, sin duelos pasados, sin malas memorias. Esto es vivir plenamente hoy, ahora que respiro y tengo esta gran oportunidad!

Espero de corazón que esto te haya ayudado en tomar alguna nueva decisión.

Por: Michelle Rodríguez de S.